Es el uso y goce de un bien a través del pago de renta fija.

Existen dos tipos, el arrendamiento financiero y el arrendamiento puro.

Se establece mediante contrato, e implica el uso y goce temporal de un bien. La diferencia con el arrendamiento financiero es que no existe opción de compra al término de la vigencia del contrato.

Es una variante de arrendamiento puro, en la que el cliente cuenta con equipo de su propiedad con una vida útil aceptable, es posible comprárselo y posteriormente arrendárselo para que siga haciendo uso y goce del mismo, pudiendo capitalizarse por la venta del equipo.

• Flexibilidad en plazos y montos acordes a la capacidad financiera del arrendatario
• El pago de la renta se registra contablemente como un gasto
• Al registrarse como un gasto el pago de la renta es 100% deducible en el caso de activos productivos
• EL IVA se paga a lo largo del contrato de arrendamiento y no al principio
• No se sacrifica liquidez
• Los pagos iniciales son mínimos a comparación de un crédito bancario

La arrendadora tendrá la opción de vender el bien a un tercero relacionado con el arrendamiento al final del contrato o bien se puede extender el plazo.

Equipo de transporte, transporte de carga, activos productivos, maquinaria, equipo de tecnología, entre otros.

Si, se pueden incluir gastos de administración de flotilla “fleet management” y “full service lease”. La administración de flotilla incluye los gastos como seguros, impuestos y tenencias. En el Full Service Lease se pueden incluir todos los gastos relacionados con el automóvil como servicios preventivos y correctivos, telemetría, llantas, etc. En ambos casos el gasto total es 100% deducible.

Si, éstos pueden formar parte de la renta mensual del activo.

Si, se pueden deducir como gastos de originación o bien se pueden amortizar en el plazo del arrendamiento.